sábado, 22 de marzo de 2014

¿Una mentira o una verdad?

Y que duele mas, ¿Una bonita mentira o una triste verdad? Todo lo hacemos tan complicado, todo. Con lo fácil que es decir las verdades a la cara, preferimos mentir a las espaldas. Por que pensamos que será mas sencillo, que dolerá menos. Pero no es así, nacemos equivocados pensando que las mentiras no duelen, que con el tiempo pueden llegar a ser verdades. Y es que la verdad duele, pero la mentira mata, y contra mas pasa el tiempo, mas daño te haces, te hacen, mas sangras. Yo sinceramente, prefiero una verdad que duela, o una puta mentira rastrera. Por que mentir es de cobardes, de personas que no saben afrontar la realidad que les a venido de frente. Y muchas veces, esas personas que mienten, es por que ellas se lo han buscado, por que acumulan mentiras, y si, en algún momento dicen una verdad, el mundo se les puede caer encima. Optáis por lo fácil, por no enfrentar las cosas, esquivarlas, sin pensar que todo eso se ve al final. Justificáis lo injustificable; 'Pensé que no te haría tanto daño' 'Así fue mejor, créeme.' ¿ Pensáis que eso duele menos? ¿Qué meses de mentiras no duelen? Y es que no duelen, matan. Por que una se cansa, y termina por no creerse nada. Los te quiero comienzan a perder sentido con el tiempo, los besos, vacíos. Y duele no poder confiar en alguien que te lo ha dado todo, y te lo ha quitado por la simple avaricia de que el también lo quería. Tu, sigue mintiendo.

jueves, 13 de marzo de 2014

'Tu ibas a matar, y yo iba a ser querido.'

Y es que cariño, si te mueres, no me lleves al infierno contigo.
Que cada uno es libre de hacer lo que quiera,
y yo cometí el error de quererte hasta perder la cabeza.
Y tu cometiste el error de dejarte querer.

Y es que uno avisa si no quiere,
por que los juegos son juegos,
hasta que un jugador ya no se divierte,
y pasa de ser juego, a ser muerte.

Y que si la quieres a ella,
no me arrastres a mi contigo,
pues yo no tengo la culpa de haberte querido,
ni de quererte.

También he de decir,
que yo también me divertí,
aunque no gana el que se divierte,
gana el que no muere.

Tu ibas cargado con una pistola,
y yo con un cuchillo,
pues tu ibas a matar,
y yo iba a ser querido.

Y ahora déjame libre,
no me mantengas atada,
necesito un respiro,
de tal agotador martirio.

Pues no gana el mejor,
gana el que mas resiste,
yo te di todo mi amor,
y tu sin mas lo cogiste.